jueves, 15 de septiembre de 2011

Sumi e

La técnica japonesa famosa en diversos puestos de diarios y en alguna que otra oscura esquina de calamar con pérdidas. ¡Éa! Aquí y ahora, yo pinto con tinta, yo soy Musashi, yo coltal tolta.
Mientras en el resto del mundo la lucha por el realismo lleva a miles de artistas a retratar mercaderes y poderosos burgueses de la nouvelle vague, en Japón están en otra: en colgarse mirando como el pincel cargado de tinta se desliza sobre el papel de arroz, en comprender el por qué de la flor, en contemplar el pajarito:
¡Éa! ¡No hay pajarito por ahora! ¿Qué contempláis pues entonces? Observad con sutileza y tranquilidad y comprenderéis la escurridiza naturaleza del que mirando llega tarde o temprano a alguna que otra conclusión del arrebato visual. Qué linda te queda esa camisa. Esa cartera no va con esos zapatos. Ese suéter es de cashmira ¿no?
¿Más qué más qué? Estoy decidido a llevar este blog hasta sus últimas consecuencias. ¿Saben qué? Se me pasó, pero el viernes 9 de este mes de septiembre, el blog cumplió medio año. Seis meses. Seis meses. Les juro (a esos dos que leen) que es increíble ir un poco para atrás y ver en qué estoy hoy... ¿en qué estoy hoy? Bueno, mucho no sé pero estoy contento. Me gusta la dirección que toman las cosas. No es una dirección súper ascendente a lo Wall Street o alguna otra galería de Belgrano. Es una dirección que crece en mi interior. Y no es una, son varias. Como raíces. Salen del palo por debajo. Sale un rompeportón. ¡Gracias lector! Volveré en breve. Y más en breve aún cambiaré el banner de entrada.

Un afectuoso saludo.

4 comentarios:

  1. ¡Pero qué impresionantes esas hojas!

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  3. que buenas te salieron.
    mi hermana tiene un libro de como hacer eso. se lo iba a pedir.
    pero luego ella se fue a buenos aires.
    y yo aquí... no es excusa lo se.
    es que no estoy muy zen
    estoy más bien a lo bestia. como es acá todo.
    a lo loco sin sombrero
    de hostias en la cabeza

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